Cosas del subconsciente.


Es ese momento en el que no sabes dónde ir, dónde mirar, porque lo único que necesitas es escapar, sin rumbo, sin maletas, sin acompañantes, sólo. Te necesitas a ti mismo, y a nadie más, y verás senderos y manos te brindarán su ayuda pero sabrás que no es el momento, que ahora necesitas soñar, imaginar, volar, sin nadie que te marque el camino, sin nadie que te levante en las caídas, solo a ti, que eres grande y lo suficientemente fuerte para poder con esto y con más, que todo se te queda pequeño, y que esto no es ni la mitad que tú necesitas, que lo tuyo es el mundo, que lo tuyo es la vida y tienes que empezar a vivirla… ahora.

 Gracias por todo J. 

Letras infundadas.

No encuentro salida a estas cuatro paredes, ni a nada de lo que nos rodea. Parece irónico que ahí fuera estés tú, esperándome, cuando sabes de sobra que no quiero salir, que estoy enamorada de las esquinas, incluso del desorden del que quiero que formes partes. Asustada sólo de pensar en lo que hay fuera, en lo que nos queda por vivir, por luchar, pero sobre todo por soportar. Espero que comprendas que no siempre he sido así, que deseaba salir, olvidarme de estos tabiques y ver más allá de lo que me ofrecen los cristales de esta fría ventana, pero no puedo, este no es el momento.